Un tiroteo en una iglesia bautista de Sutherland Springs, Texas; una comunidad de apenas 400 habitantes situada 30 millas al este de San Antonio dejó un saldo de 26 personas muertas y 20 heridos.
El comisionado del condado Wilson, Albert Gamez, informó que el ataque ocurrió en la iglesia First Baptist. Según testigos, un hombre entró en el templo en torno al mediodía, durante la celebración de la misa y realizó al menos 20 disparos, al mismo tiempo, un miembro de la comunidad forcejeó con él para quitarle el arma, luego el sospechoso salió corriendo y huyó en su automóvil apareciendo muerto varios minutos después. Aunque aún se desconoce si se suicidó, o si le disparó un vecino que le persiguió, o si pereció tras sufrir un accidente de tráfico.
La hija del pastor Frank Pemeroy, Anabelle, es una de las víctimas fatales, sin embargo los nombres del resto de las víctimas no se han dado a conocer.
Debido a esta terrible masacre decenas de personas se congregaron la noche del domingo en Sutherland Springs para realizar una vigilia en honor a los fallecidos.
Devin Patrick Kelley, de 26 años de edad quien según fuentes del pentágono sirvió previamente en la Fuerza Aérea de donde fue dado de baja por mala conducta en 2014. Fue juzgado en consejo de guerra en 2012 por dos cargos de agresión contra su cónyuge y asalto a su hijo. Durante el ataque vestía totalmente de negro y se protegía con un chaleco antibalas, lo que apunta a que había premeditado su acción hasta el último detalle. Sus motivos aún se investigan sin descartar ninguna hipótesis.
Los trágicos sucesos ocurrieron coincidentemente 8 años después de que el mayor Nidal Malik Hasam matara a 12 personas y dejara 31 heridos en la base Fort Hood, Texas.
El presidente Donald Trump escribió en su cuenta de twitter: ” Que Dios esté con la gente de Sutherland Springs, Texas. El FBI y la policía están en la escena. Estoy monitoreando la situación desde Japón“; mientras que más tarde valoraría las causas de estos hechos que calificó de “espeluznantes”, relacionándolos con la salud mental y de esto modo minimizaba la problemática relacionada a la tenencia de armas.
Por otra parte el ex presidente Barack Obama expresaría en su cuenta de twitter su opinión al respecto: ” Que Dios también nos otorgue a todos la sabiduría para preguntar qué medidas concretas podemos tomar para reducir la violencia y el armamento en nuestro medio” y emotivamente publicaría este alentador mensaje: ” Nos lamentamos con todas las familias en Sutherland Springs dañadas por este acto de odio, y nos uniremos a los sobrevivientes mientras se recuperan …”
El perpetrador de este horrendo crimen tomó deliberadamente la vida de ciudadanos inocentes que asistían al culto religioso, de este modo la ola de inseguridad crece y las personas sienten la impotencia de vivir con miedo en un país donde circulan más de 350 millones de armas de fuego.
Fuentes: www.mundohispanico.com; www.telemundo.com